Arucas, 31 de Agosto de 2012, el Sol brillaba con fuerza y los nervios estaban a flor de piel. Los novios se dejaban llevar por la magia del día que tanto habían estado esperando. Preparando cada momento durante todo un año con gran cariño, hasta el mínimo detalle estuvo bien pensado y elaborado con la mayor de las ilusiones.
Pero ya estaba aquí, había llegado el gran día y llegaba el momento de prepararlo todo.
A continuación A+J...

La Haciendo del Buen Suceso fue el lugar elegido para la celebración, un lugar idílico en el que cada rincón tenía una belleza que no dejaba indiferente. Colocamos un mesero muy coqueto y original donde los invitados pudieron ver donde iban sentados con facilidad...

Las mesas se llamaban según los lugares a los que los novios habían viajado y colocamos una foto de cada viaje sobre unas piñas; quedaron muy finas y le dieron un toque rural a las mesas. ¡Nos encantan!

En los platos los invitados encontraron unas galletas decoradas con fondant riquísimas elaboradas por Cherry Cook, cada galleta tenía una tarjetita en donde los novios les dedicaron unas palabras a cada invitado...¡cómo se lo curraron los novios!

Cuando todo estuvo colocado, en la suite nupcial de la Hacienda la novia comenzaba a prepararse... Los zapatos, los pendientes, el ramo... Todo irradiaba elegancia y buen gusto...



Y un maravilloso vestido que aguardaba airoso a ser lucido por la bella novia:

El resultado final fue una novia guapa, elegante, ilusionada y que se dejaba llevar por cada momento del día:


Fue una ceremonia celebrada en la iglesia San Juan Bautista de Arucas, bonita donde las haya... El novio entró del brazo de su madre aparentemente tranquilo y feliz. La novia de la mano del padre, muy sonriente... Fue una ceremonia muy emotiva y llena de amor...





A continuación, se hicieron fotos por los alrededores, eran sus primeras fotos como marido y mujer:

Y llegaba el momento de celebrarlo, en las zonas ajardinadas de la Hacienda en donde los invitados comenzaban a degustar un magnífico cóctel, para continuar en la zona de la cena con unas sillas y mesas muy elegantes al aire libre.


Una vez todos habíamos cenado, llegaba uno de los momentos más románticos: el baile de novios.

Y tras esto...¡empezaba la fiesta! A bailar todo el mundo...

Un photocall con imágenes de Tailandia (destino de la luna de miel) y motivos orientales divirtieron a novios e invitados:

Fue una gran fiesta, buena música, alegría, diversión... tuvo todos los ingredientes necesarios para que los invitados disfrutaran hasta que el cuerpo aguantara...


Y sí... los novios acabaron en la piscina... Un gran día para no olvidar...
Fotos realizadas por Rafa Ramírez



























